En el último tiempo se han denunciado y han sucedido casos de perros muertos por comida contaminada con veneno para ratas.
Han pasado hechos realmente tristes para la vida animal, aún no se conoce quién es el autor, pero se denunció que están dejando albóndigas, muy chicas a la vista humana, pero detectables al olfato animal envenenadas. La razón no se sabe aunque sí se puede dilucidar que es para hacer daño, ya sea por no gustarle las mascotas o por tener algún desencuentro con el vecino.
A partir de estos casos, son 5 los perros fallecidos y quizás algunos más. Se supo que pasa en varios lugares de la Capital, pero hoy toca hablar de casos en Caballito, exactamente en el Parque Rivadavia, un lugar para disfrutar con la familia, pasear y que la única preocupación sean los mosquitos y el sol que puede dar muy fuerte se agrega otra preocupación: el veneno. Se dice que es un hombre con mochila que dejó albóndigas, el problema es que todavía no lo encontraron.
Las deja en los lugares que hay pasto así visualmente las personas no se dan cuenta, el problema es que los perros tienen un gran olfato a la hora de saber donde hay comida, por obvias razones no discriminan si eso está en buen o mal estado. El consejo que se dio hasta que encuentren al culpable es que la mascota salga con bozal o que si tironea porque olió algo sacarlo de ahí y llevarlo para otro lado para evitar peligro.
Al principio fue un perro, pero luego fueron saliendo más declaraciones, una vecina del barrio prestó declaración: “Me enteré por unos paseadores que me dijeron que tuviera cuidado. Una señora me dijo que en algún lugar está filmado, que vieron a un hombre con una mochila que envenenaba el sector de atrás de donde venden los libros«.
Los vecinos asustados por esto creen que quizás por el momento lo ideal sería ir a otras plazas o parques hasta que haya una solución. El otro problema es que no solo los perros sino también los nenes chicos, es muy común estar en el pasto disfrutando del día mientras el nene pasea por el parque, no se le puede privar ese divertimento; a la vez habrá que tener mil ojos para evitar futuros problemas con las albóndigas cubiertas por veneno de ratas.
Al comenzar a aparecer varios casos más, los vecinos elevaron una queja a la comuna 6. Se llevó para que alguien tome cartas en el asunto y se pueda averiguar quién es y haya una solución para que la gente pueda salir tranquila, sin ningún temor a sacar a pasear a sus respectivas mascotas. El salir les hace bien, pero tener que caminar con miedo por si tu perro consume esas albóndigas tampoco es bueno.
Algunos expertos señalaron que estas acciones ocurren en cualquier barrio, incluso que no solo envenenan comida sino también le ponen clavos o vidrios. Estamos hablando de una o varias personas malas, vecinos que quieren hacer daño. Se aconsejó que hay que estar atentos a lo que hay cerca de los árboles, cerca de los tachos, en las esquinas. Que si el perro agarra una comida o algo, y tiene algún síntoma, el perro tiene que ser llevado a la veterinaria y que no hay que hacer ningún intento de manipulación.
Los vecinos de Caballito deberán estar atentos a lo que huelen sus perros y además lograr divisar a la persona que hace estas atrocidades y que dadas las circunstancias y las mascotas que han aparecido es claro que es una persona, si así se puede llamar, horrible.