Con una noche de música en vivo, sorteos y propuestas gastronómicas, el Centro Vecinal de Plaza Irlanda reunió a vecinos y vecinas para colaborar con el comedor comunitario del espacio. La iniciativa alimenta cada jueves a casi 100 personas.

El pasado sábado 12 de abril durante la noche, el Centro Vecinal de Plaza Irlanda, ubicado en Seguí 850, fue la sede de un gran festival solidario. Con un alimento no perecedero como entrada, el objetivo del festejo fue recaudar donaciones para sostener el comedor comunitario del espacio. Así, los vecinos y vecinas que asistieron y colaboraron pudieron disfrutar de una noche llena de música en vivo, sorteos y propuestas gastronómicas.
El Comedor Comunitario de Plaza Irlanda (a través de su iniciativa Plaza Irlanda Solidaria) brinda cenas solidarias todos los jueves del mes a casi 100 personas. Por eso, en esta oportunidad se solicitó la colaboración de la comunidad con alimentos no perecederos como aceite, arroz parboil, fideos guiseros, salsa de tomate, jugos en polvo, latas de arveja o choclo, y leche larga vida o en polvo.
“Hubo tres bandas: una de folclore (Huinca Machao), una de rock (El Club de los Elefantes) y una de cumbia (Va queriendo). También, hubo sorteos con muchos premios donados por compañeros y vecinos”, expresó Manuel Guerra, integrante del grupo que lleva adelante las iniciativas solidarias. “El objetivo fue juntar comidas y recursos para el comedor que funciona todos los jueves”.
Guerra agregó que “Plaza Irlanda Solidaria no tiene ninguna asistencia de ninguna institución, organismo, y mucho menos del Estado de la Ciudad. El comedor lo solventamos solo con donaciones de comercios y de vecinos y el festival nos sirve para seguir sosteniéndolo” y remarcó que “hubo mucha gente participando. El salón estuvo lleno y quedó un montón de gente afuera”.
A su vez, el integrante del espacio solidario comentó que “lo del festival lo empezamos a hacer el año pasado, cuando hicimos dos peñas con el mismo objetivo de recaudar alimentos y también de proponer a esta parte del barrio, que no tiene mucha oferta cultural, un sábado distinto para disfrutar y pasarla bien”.
Por otra parte, Guerra consideró que “el balance que hacemos del comedor es, en primera instancia, bueno porque lo pudimos sostener y lleva un año funcionando todos los jueves por la noche. En otro sentido, mal porque empezamos con una asistencia de 30 o 40 personas y hoy ya estamos en un promedio de 90 o 100 personas por noche. Cada vez hay más gente en situación de calle”.
El miembro de Plaza Irlanda Solidaria señaló que “en este contexto, las personas en situación de calle están muy mal. Algunos salen a pedir, otros a buscar changas y no consiguen nada, otros van a ferias a vender, como a Parque Centenario o a Chacarita y se vende poco. Encima, el Gobierno de la Ciudad los echa de las plazas. Están en una situación muy mala en donde nadie les da una mano y el Gobierno porteño busca expulsarlos”.
Por último, Guerra remarcó que “el proyecto que tenemos para este año es que mientras la gente siga necesitando platos de comida, nosotros tratemos de darlos. No es sencillo sostener una olla, no es sencillo darle de comer a 100 personas. También, tenemos algunas ideas para poder agregar algo de cultura, algo más de charla que ayude a la gente que viene a comer. El año pasado intentamos hacer algo así como una bolsa de trabajo, pero el desempleo es cada vez más y eso se nos complicó. Así que, en principio, el principal proyecto es sostener la olla que no es cosa fácil”.