En la calle Aranguren 1365/1369, funciona un negocio que puede marcar época.

Al pasar los años el barrio porteño de Caballito va en aumento, pasa el tiempo y la comuna 6 crece a pasos agigantados. Siempre fue un barrio rico en muchos aspectos, pero en el último tiempo fueron creciendo los espacios gastronómicos. El año pasado, en marzo, fue inaugurado “Galpón Oeste”, es un lugar para ir a comer y disfrutar de los platos ricos que ofrece.
El espacio queda en la calle Aranguren 1365/1369 y es un lugar más que amplio y siempre al aire libre, con sillas y mesas grandes. La decoración es de color verde por su cercanía con el estadio de Ferro, el nombre “Galpón Oeste” rumbea su amor por el club y es sabido que cuando juega la institución el rincón gastronómico se llena de color y algarabía para ver el partido. Incluso si los socios que quieren asistir a ver el partido llevan su carnet se les hace una promoción especial de 2×1 en vermú.
El espacio surge como un proyecto familiar y fue expandiéndose en los últimos meses. Vale aclarar, es un lugar querido por el barrio, pero todavía hay mucha gente que desconoce este sitio. El boca en boca es lo que lo hace conocerlo un poco más, antes esa era la mejor publicidad para cualquier negocio. El llamado “boca en boca”, si un comensal nuevo llega al lugar y dice me enteré de este espacio por un amigo que me contó; el lugar va sobre ruedas. Quiere decir que le gustó y se lo recomendó a alguien más.
La carta de “Galpón Oeste” es amplia, pero su gran especialidad son los sándwiches gourmet, además brindan opciones como el osobuco con vegetales y el pastrón con pepinillos. Los platos son abundantes por eso se sugiere que sean visitados en reuniones, ya sea familiares o amigos.
Además de los sándwiches, los comensales han destacado las picadas, según parece los fiambres utilizados son seleccionados y enviados desde Tandil, ciudad donde se realizan los mejores embutidos. El espacio situado en Aranguren tiene todo para ser un lugar que marque época, ya que le importa la calidad y cantidad cuándo se refiere a vender y gustar al cliente.
Los clientes tienen la oportunidad de preparar sus sándwiches a gusto y piaccere: pueden elegir la carne, los aderezos, los vegetales y complementos. Además, el acompañamiento de las papas fritas es imprescindible. Los panes más elegidos son la ciabatta, el panini, el bagel y la focaccia. Los vegetarianos y veganos están dentro del menú, al igual que los fanáticos de los tragos.
Llega el momento del cierre de la cena y no puede faltar el postre, “Galpón Oeste” no deja nada librado al azar y ofrece una amplia variedad: desde los crumbles de manzana y frambuesas, el rogel con dulce de leche, la torta Havanna, el lemon pie y el brownie con dulce de leche son delicias importantísimas para cerrar una noche perfecta.
Dentro del negocio hay una tienda en el cuál venden los productos para poder emularlos en las casas, pero siempre es recomendable guardarse un tiempo para visitar este negocio y permitirse ser atendido y disfrutar de una noche agradable. El espacio tiene una buena valoración, 4,3 estrellas de 5; es un gran número para un lugar que tiene un año desde su inauguración y su mayor publicidad es el boca en boca.
Es claro que este negocio, este galpón oculto como se lo llama está muy cerca de dejar de ser oculto para pasar a ser un galpón famoso por sus excelentes platos. Vale aclarar que es pet friendly así que toda persona con mascota puede asistir. El lugar abre todos los días excepto los lunes y martes, lo único que varían son los horarios: los miércoles, jueves y viernes se puede asistir de 19 a 23; los sábados, de 12 a 16 y de 19 a 24; y los domingos, de 12 a 16 y de 19 a 23.
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