Un joven confesó haber matado y descuartizado a su padre. El hijo de la víctima, de 21 años y bajo tratamiento psiquiátrico, fue detenido tras admitir el crimen. El cuerpo del médico jubilado fue hallado en valijas dentro de su departamento.
Conmoción en el barrio de Caballito tras el hallazgo del cuerpo descuartizado de Daniel Alejandro Cichero, un médico jubilado de 73 años, en el interior de su departamento, ubicado en la calle Aranguren al 1600. Su hijo menor, de 21 años, fue detenido como único sospechoso del crimen y confesó su autoría ante los investigadores.
“Discutí con él y pasó lo que pasó”, habría manifestado el joven al regresar a la escena del crimen, donde lo esperaban su hermano mayor y efectivos de la Comisaría Comunal 6 de la Policía de la Ciudad.
En ese momento, personal policial se encontraba trabajando en el lugar del hecho, que presentaba signos evidentes de violencia extrema: una valija en el piso de la que sobresalían restos humanos y, a escasa distancia, una bolsa de nylon con la cabeza de la víctima.
De acuerdo con las primeras líneas de la investigación, el acusado convivía con su padre desde hacía poco más de un año. Se encontraba bajo tratamiento psiquiátrico por un diagnóstico de esquizofrenia, pero había abandonado la medicación en las semanas previas al crimen. Los investigadores no descartan que esta situación haya sido un factor determinante en el desenlace del hecho.
La escena del crimen fue un departamento del sexto piso del edificio de la calle Aranguren y la reconstrucción inicial señala que la víctima fue atacada dentro de la habitación, en donde el atacante le realizó múltiples heridas punzantes en el torso y en sus brazos. Luego, el agresor habría trasladado el cuerpo a la bañadera del departamento, donde procedió a seccionarlo utilizando al menos dos cuchillos y una sierra.
Los restos habrían sido distribuidos en dos valijas. En la primera, el joven colocó las piernas; en la segunda, introdujo el torso con los brazos y, posteriormente, le cortó la cabeza para intentar cerrar el equipaje. Ambas piezas de equipaje fueron encontradas parcialmente cerradas, junto a herramientas utilizadas en el crimen y manchas de sangre en distintas zonas del inmueble.
Los peritos también hallaron una pala con restos de tierra húmeda, lo que sugiere que el acusado intentó cavar un pozo en el fondo del edificio, posiblemente con la intención de enterrar los restos. No obstante, habría desistido ante el esfuerzo físico requerido para completar la tarea.
Asimismo, se constató que la sierra utilizada en el descuartizamiento fue limpiada tras el hecho, lo que indica un intento del autor por borrar evidencias. Pese a ello, otros elementos clave como la sangre en la bañera y la presencia de cortes profundos en el colchón y mobiliario cercano reforzaron las pruebas reunidas en su contra.
Daniel Alejandro Cichero era un médico retirado. La convivencia con su hijo menor se habría vuelto conflictiva en los últimos meses, principalmente, debido al abandono del tratamiento psiquiátrico por parte del joven, quien ya habría tenido episodios de inestabilidad emocional. El joven permanecerá detenido y será sometido a pericias psiquiátricas para determinar su imputabilidad al momento del hecho.
Fuente: Google Street View.
