Rescataron 42 gatos y dos perros en condiciones de hacinamiento tras un allanamiento en una vivienda de Rivadavia al 6000. El operativo fue impulsado por denuncias vecinales.

Una vivienda del barrio de Caballito funcionaba como criadero ilegal, donde se mantenía a decenas de animales en condiciones insalubres y de hacinamiento. La intervención de la Policía de la Ciudad permitió rescatar a 42 gatos y dos perros de raza Pitbull, que permanecían encerrados en una habitación sin acceso adecuado a agua, higiene ni cuidados básicos.
El procedimiento se realizó en una propiedad ubicada en el barrio de Caballito, luego de que vecinos alertaran sobre ruidos y olores provenientes del lugar. La causa fue tomada por el Dr. Néstor Maragliano, titular de la Fiscalía Penal, Contravencional y de Faltas N.º 25, quien solicitó el allanamiento autorizado por el Juzgado Penal, Contravencional y de Faltas N.º 1, a cargo del Dr. Rodolfo Ariza Clerici.
Participaron del operativo efectivos de la División Canes de la Policía de la Ciudad, el Cuerpo de Investigaciones Judiciales (CIJ), la Agencia de Protección Ambiental (APRA), la Dirección General de Control Ambiental (DGCONTA) y la Agencia Gubernamental de Control (AGC).
Según el parte oficial, los animales estaban hacinados en una sola habitación de la vivienda, en un ambiente con fuertes signos de descuido y maltrato. Se labraron actas por violación a la Ley 14.346 de protección animal, y en el caso de los perros, también por no contar con la inscripción obligatoria en el registro de tenencia de razas potencialmente peligrosas.
Los animales fueron puestos a resguardo y entregados a distintos hogares y adoptantes responsables.
Este hecho se suma a otro procedimiento similar ocurrido en el barrio de Villa Devoto, donde se desmanteló un criadero ilegal de perros en un domicilio de la calle Llavallol al 5400. Allí se rescataron seis canes de raza Wire Fox Terrier, que permanecían enjaulados en condiciones inadecuadas. Dos de ellos presentaban una situación especialmente alarmante: les habían practicado cordectomía, una cirugía brutal que consiste en cortarles las cuerdas vocales para evitar que ladren y así pasar desapercibidos.
La denuncia, también impulsada por vecinos, alertó que el criadero ya había sido allanado en una ocasión anterior, pero el responsable había reanudado la actividad. El responsable del criadero fue imputado por infracción a la Ley Nacional N.º 14.346, que sanciona el maltrato y la crueldad hacia los animales, además del artículo 206 del Código Penal. Todos los animales fueron entregados a ONG y rescatistas especializados, bajo acta de custodia.
Estos casos evidencian la importancia del compromiso vecinal y la respuesta articulada entre distintas áreas del Estado para frenar el maltrato animal. También dejan en claro que las redes clandestinas de cría persisten y que es clave denunciarlas para su erradicación.